




No es solo una pulsera.
Es un pedazo de historia que llevás en la muñeca, un talismán que te recuerda que la fuerza no está afuera, está adentro tuyo.
Cada runa marcada en el acero guarda un secreto: protección, coraje, destino. Y cuando la llevás, no importa si estás en la rambla mirando el atardecer, en un fogón con amigos en el campo, o tomando unos mates antes de arrancar el día… la sentís. Es como tener un pedazo de la vieja sangre vikinga latiendo en tu piel.
Acá, en este rincón del sur del mundo, también sabemos de batallas. Los vikingos tenían sus mares helados, nosotros tenemos la garra charrúa. Y esta pulsera une esas dos fuerzas: el espíritu de los ancestros con la rebeldía de nuestra tierra.
🔥 No es moda. Es identidad. Es llevar la fuerza contigo, todos los días.